La industria de la construcción se desplomó en julio de este año, pues el valor de la producción de las empresas del sector cayó -9.9 por ciento a tasa anual, lo que representó el peor descalabro en 37 meses, pues en febrero de 2021 (en el marco de la cuarentena por COVID19), bajó -15.1 por ciento de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Con ello, el indicador que mide el valor de la producción se colocó en 96.4 puntos, muy lejos del máximo histórico alcanzado de 137.3 unidades, alcanzado en diciembre de 2006, al cierre del gobierno del entonces presidente Vicente Fox.
Al respecto, Gabriela Siller, directora de Análisis Económico de Banco Base, explicó que la crisis por la transita la industria de la construcción responde, en mayor medida, a los recortes que se han aplicado en inversión pública en rubros como infraestructura.
“Por tipo de contratista, el sector público registró una caída de 27.55 por ciento anual, la mayor en registro”, destacó la asesora del grupo financiero.
Y en efecto, por medio de un reporte, el INEGI precisó que dentro el sector de valor de producción de las empresas constructoras, el rubro de transporte y urbanización cayó -37.8 por ciento seguido por el de electricidad y telecomunicaciones (-3.7 por ciento), y petroquímica y petróleo (-3.4 por ciento).
En contraparte, los rubros de edificación crecieron 12.4 por ciento, en tanto el de agua, riesgo y saneamiento avanzó 23.5 por ciento.
En su comparativo mensual, resultó que el valor de la industria de la construcción bajó 0.9 por ciento, tras el avance de 3.9 por ciento alcanzado en junio.
